Para cualquier franquicia llegar a los playoffs es la confirmación de una buena temporada, para todo equipo considerado "bueno" en la NBA es la lucha por el tan esperado anillo y para un aficionado es la época más emocionante y fuerte de la temporada.
En los últimos siete años Miami Heat había escrito su nombre en la tan prestigiosa lista de los mejores ocho equipos de la conferencia Este, en los últimos cuatro llegó a coronarse campeón de conferencia y logró dos anillos consecutivos.
Si, por primera vez en siete años estamos por fuera de la mejor etapa de la temporada, pero también por primera vez en tantos años el equipo completo tendrá tiempo suficiente para descansar, prepararse y retornar de la mejor manera a una nueva temporada.
Muchos hablaron de las razones, de lo mal que ha dirigido Spo el equipo, la partida de LeBron o la falta de compromiso de algunos jugadores. Si quieren una opinión clara de un fanático les puedo decir que todos esos comentarios son falsos. En los muchos años que llevo siguiendo a este equipo he aprendido que lo último que se pierde es la esperanza, nunca los he visto bajar la cabeza, ni siquiera al perder un CAMPEONATO.
Vuelvo luego de tanto tiempo a decirles que me siento orgulloso de mi equipo, regresaremos más fuertes, que me duele no verlos en playoffs pero que disfruto al máximo de lo que ocurre actualmente en la temporada. Acabo de terminar de ver el segundo juego de Warriors vs Rockets y no saben las sensaciones que me produce este deporte a pesar de que mi equipo no se encuentre en esta instancia! Le deseo lo mejor a cada uno de los finalistas pero mi corazón va siempre con LeBron... si, no soy un fanático dólido, de eso hablaremos la próxima. Por ahora seguiré soñando con una final Warriors vs Cavs, tal vez con el MVP consiguiendo su primer anillo, o con el chico de Ohio dándole su primer campeonato a Cleveland. 